Tosta de salmón marinado con huevo poché sobre mozzarella

Arianne
Arianne @Arianne
Esquinita verde de la Península Ibérica, llamada A Coruña

Creo que no somos conscientes de lo que la vida nos regala a diario, que no nos creemos nuestra suerte; y muchas veces, vendemos nuestra alma a algún que otro diablo terrenal, pensando que la felicidad puede comprarse.
Quizá no sea tan complicado construir un imperio, como cuidar la relación con las personas que nos acompañan en nuestra vida… que muy a menudo, no tenemos en cuenta, sino cuando nos hacen falta.
Para mí es un orgullo tener la familia que tengo, los amigos que siguen ahí y los conocidos que se paran a saludarme cuando me ven en la calle, y me sonríen sinceramente sabiendo que las cosas van bien.
Y es que sueño (hasta con los ojos abiertos) planeando mil proyectos y construyendo otros tantos castillos (pero no en las nubes)… y nada tendría sentido, si sólo se lo pudiera contar a mi almohada…. Así que a diario doy las gracias por poder dar un abrazo, reírme a carcajadas por una broma.. o preparar estas riquísimas tostas y sorprendernos por lo ricas que quedaron.

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Ingredientes

15 minutos
6 Comensales

Paso a paso

15 minutos
  1. 1

    Tostamos el pan.

  2. 2

    Sobre las tostadas, ponemos una cama generosa de mozzarella rallada.

  3. 3

    Cortamos el salmón, en lámina finas.

  4. 4

    Y mientras cocinamos los huevos poché, con los moldes léuké, controlando que no suba la temperatura a más 100°C, y están hecho en alrededor de 3-4 minutos.

  5. 5

    Montamos la tosta, poniendo sobre la cama de mozzarella, el salmón, eneldo espolvoreado, el huevo poché y 2 o 3 pepinillos partidos por la mitad.

  6. 6

    A disfrutar!

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Escrita por

Arianne
Arianne @Arianne
Esquinita verde de la Península Ibérica, llamada A Coruña
Me encanta recorrer el mundo en cada bocado.Apasionada del mar, de los viajes, de la astronomía y de los libros. Poco golosa pero exigente con la calidad de los productos. ¿El final perfecto de cualquier instante gastronómico? La buena compañía... tanto a la hora de prepararlo en la cocina, como al sentarse en la mesa. Porque disfruto cocinando con y para los míos; me encanta ese desafío de conectar con mis comensales, de compartir y de no sólo hacer disfrutar a las papilas gustativas. De crear, en definitiva, un momento, un recuerdo y un vínculo con los que quiero.
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