Costillar ibérico al vino blanco y tomillo

Ramón Palmerín Granado
Ramón Palmerín Granado @cocinosinsal

Costillar ibérico adobado en vino blanco y tomillo más de 12 horas.
Una carne tierna y jugosa que puedes preparar a tu gusto, con las especias que más te gusten.

El jugo del adobo lo he añadido a unas patatas panaderas que utilizaremos de acompañamiento.

Por motivos de salud no puedo tomar sal, así intento disfrutar de la gastronomía a mi manera, lo más natural posible y sin sal.

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Ingredientes

1 dia
4 o 5 raciones
  1. 1costillar
  2. 5ajos
  3. Cebollino molido
  4. Pimienta negra molida
  5. Tomillo
  6. 1 vasovino blanco
  7. Aove

Paso a paso

1 dia
  1. 1

    Preparamos los ingredientes

  2. 2

    Cogemos un vaso batidor, le añadimos el vino, el aove, los ajos la pimienta y el cebollino.
    Batimos con la ayuda de.uma batidora

  3. 3

    Colocamos el costillar en una bandeja, le colocamos el tomillo y rociamos la mezcla que hemos batido.
    Maceramos 12 hora tapado en la nevera.

  4. 4

    Una vez adobado durante la noche, envolvemos el costillar en papel de aluminio, lo llevamos al horno a 200° durante 1, 30 h

  5. 5

    Pasado el tiempo lo sacamos del horno, abrimos el papel de aluminio y comprobamos pinchando con un cuchillo que realmente está meloso.
    Si no es así volvemos a tapar y llevamos al horno otro tiempo. Tenemos que tener en cuenta que el tiempo de cocción no es una ciencia exacta ya que depende el grosor del costillar y el horno (hoy hemos estado 2, 5 horas)
    Seguimos horneando.

  6. 6

    Una vez nos aseguramos de que está al punto que más nos gusta, lo retiramos del papel de aluminio, horneamos 15 o 20 minutos más, en este caso es para que quede más séquito de la parte exterior.

  7. 7

    Servir y listos

  8. 8
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Comentarios

Escrita por

Ramón Palmerín Granado
En octubre del 2021 me extirparon un riñón con cáncer en fase número 2. Me aconsejaron evitar la sal. Así que empecé a comer sin sal y procuro comer lo menos procesado posible.Siempre me ha gustado cocinar, y ahora es cuando realmente empiezo a entender la cocina y a disfrutar de ella. Creo que cocinar con cariño, despacito, sin prisa, le da un gusto diferente a la comida. Si le añadimos algún toque de sabor es cuando no necesitamos la Sal.
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