En primer lugar, hay que limpiar bien las carrilleras quitando nervios y grasa.

Trocea las carilleras, salpimenta y márcalas en una cazuela con aceite de oliva. Reserva.

Añade la cebolla, el puerro y el ajo picados finamente y pocha.

Cuando estén pochados, añade las zanahorias en trocitos. Agrega el tomillo y salpimenta.

Incorpora las carrilleras, moja con el vino de Oporto y cocina 5 minutos hasta que se evapore el alcohol.

Añade el caldo de carne y cocina hasta que la carne esté tierna.

Cuela el caldo y resérvalo para el risotto.

Incorpora el arroz a la olla con las verduras y remueve unos segundos. Moja con el caldo caliente y ve añadiendo cazos de caldo durante toda la cocción a medida que se vaya evaporando. Deja cocinar entre 15-18 minutos.

Retira del fuego y deja reposar tapado durante 2 minutos.

Añade la mantequilla cortada en cubitos y remueve hasta que se funda y se mezcle.

Incorpora la carne de las carrilleras.

Sirve con el queso, parmensano rallado por encima 😋

Recomendaciones:Utiliza un tinto suave, que no sea ácido, si no el arroz puede quedar demasiado fuerte. También puedes modificar la proporción tinto-agua en función de tu gusto. De todas maneras, las especias, el parmesano y la zanahoria ayudan a compensar la acidez del tinto.

En cuanto al arroz más adecuado para hacer el risotto, los italianos suelen emplear arroz arborio, que al cocinarse queda muy cremoso. Yo he utilizado arroz bomba, que era el que tenía en casa. El arroz bomba tampoco es un mal arroz porque absorbe muy bien los sabores.