Una vez bien derretido el aceite de coco virgen extra lo sumamos al resto de ingredintes, mezclamos los ingredientes 1 minuto y medio a velocidad 4. Debe quedar una masa homogénea.

Es posible que se suba un poco mientras se mezcla, de modo que con ayuda de una lengüeta empujamos la mezcla para abajo y volvemos a mezclar un par de segundos más. Hasta que lo veamos todo bien integrado. Luego pasamos la masa a un bol, repelando bien el baso y las aspas.

Si hacéis las galletas para alguien con alergia a los lácteos tened mucho cuidado con añadir pepitas de chocolate. La mayoría de los chocolates "puros" se fabrican junto con otros tipos que contienen leche, por lo que la mayoría de veces se indica en la etiqueta que puede contener trazas de lácteos y frutos secos. En caso de duda mejor evitarlos 🙅‍♀️

Si os decidís a ponerle pepitas, añadidlas al bol con la masa y mezclad bien para que las pepitas queden bien repartidas. Se reparten mejor si se pican las onzas pequeñas. Para ello yo hago los cortes en diagonal 2 veces, primero por una esquina y después haciendo rombos.

Las metéis en el horno 10 minutos. Transcurrido ese tiempo comprobamos que estén echas y sacamos a enfriar. Para que se enfríen mejor es aconsejable pasar el papel con las galletas a una rejilla para que circule mejor el aire.