Blueberries Cheesecake

Empezamos con la base de la tarta. Mezclamos las galletas trituradas, la mantequilla y la canela hasta que quede una mezcla uniforme.

Colocar la mezcla en un molde desmontable, repartiendola de forma uniforme. Un buen truco es crear un borde con la mezcla, porque al desmontar el molde quedará mejor integradao el relleno y la base, lo que ayuda muchísimo al cortar las porciones para que no se deshagan.

Hornear 15 minutos a 150 grados centígrados. Cuando la mezcla cambie de color es el momento de sacarla del horno. Lo importante es que el calor integre los ingredientes, así que idependiendo del horno, hasta 10 minutos son suficientes. Cuando esté listo, sácalo del horno y déjalo enfriar.

Vamos con el relleno. Batir el queso crema y el mascarpone hasta que se integren bien y tengan una consistencia cremosa.

Añadir el azúcar y batir suavemente hasta que se integre la mezcla. Añadir el yogur natural y batir.

Añadir la harina de trigo y batir hasta que no haya grumos, Es recomendable tamizar la harina con un colador y agregarla poco a poco para asegurarnos de que no hay grumos.

Añadir los huevos y batir hasta integrar bien.

Añade los arándanos y mezcla suavemente. Con el calor del horno, explotarán en la mezcla y aportarán sabor y acidez a la crema.

Finalmente, añadir el zumo de lima y la ralladura. Es importante hacerlo en último lugar para que no se corte la mezcla de quesos.

Añade la mezcla a la base, que ya habrá enfriado. Hornea durante 45 minutos a una hora a 100 grados centígrados. Hornear a fuego lento permite que la tarta se cocine perfectamente sin quemarse. Estará lista cuando al pinchar la con un cuchillo salga prácticamente limpio: al ser una tarta creomssa el cuchillo no sale perfectamente limpio como en el caso de un bizcocho.

Saca la tarta del horno y deja que enfríe. Cuando esté templada, coloca los arándanos y el azúcar glas. La temperatura residual de la tarta ayudará a que se mezclen los sabores y jugos de la fruta.

Enfriar en la nevera antes de desmoldar la tarta. Es recomendable que enfríe durante dos horas, porque permite disfrutar mejor de los sabores y desmoldar la sin riesgo de que se rompa la mezcla. Y ahí ya está lista para comer!