El secreto es separar tallos de flores y PELAR los tallos, pues es la "piel" lo duro. El interior es tierno y tiene el mismo sabor que el brócoli. Para una preparación veloz, cortar el tronco grueso en 2 o 4 a lo largo y luego en rebanadas finas; los tronquitos medianos también pueden pelarse; los chicos no lo necesitan. Todo cortado en rebanaditas finas.

Usualmente cocino las flores al vapor, para comerlas así, frías o calientes, como ensalada o como guarnición. También se puede usar para hacer una tarta o para una pasta liviana y muy saludable (ver. Rigatoni con brócoli o fetuccini con brócoli o risotto de arroz integral con pollo y brócoli).

Para hacer el salteado básico, picar bien chiquita una cebolla de verdeo (con el verdeo tierno) y una zanahoria. También se puede hacer con papa o con calabacín, o con lo que se quiera.

En una sartén antiadherente, verter unas 2 o 3 cdas. de aceite y echar todas las verduras juntas. Salpimentar. Al estar cortadas chicas, la cocción es pareja. Remover a fuego vivo y, si se las quiere "al dente", cocinar así, removiendo la sartén, unos 6'. Si se las quiere más tiernas, bajar el fuego a mediano, añadir 2 cdas. de agua y cocinar tapado unos 10'.

Si lo que se quiere es una tortilla o fritatta, batir los huevos.

Añadir las verduras no demasiado calientes y mezclar bien.

Pincelar con aceite la sartén anti adherente bien limpia (si quedó algo de las verduras, se pegará la tortilla) y caliente y verter la mezcla. A mí me gusta cocinarla a fuego bajo y semi tapada, para que coagule el huevo parejamente.

Lo blanco de arriba es queso pecorino que le rallé a último momento. Remover con suavidad la tortilla. Cuando se mueva, está despegada y cocida de un lado. Se volcará sin problemas.

Darla vuelta con ayuda de un plato y dejar unos 2 o 3' más. Se pueden seguir los consejos de "Técnicas de cocina: Preparar una tortilla de verdura".