Pollo estofado al curry japonés casero con cebollitas dulces

Es muy importante que los ingredientes sean de primera, para obtener un resultado exquisito aunque no sean orgánicos.

En primer lugar, cortamos el pollo en trozos medianos, lo enjuagamos bien y lo dejamos escurrir bien todo el agua en el un colador dentro del frigorífico.

A continuación, pelamos la cebolla, el pimiento de semillas, las cebollitas, las zanahorias que las cortamos en rodajas gruesas y lo dejamos todo en un bol con agua y dejamos también los tomates charys bien lavados.

Seguidamente, ponemos una cazuela baja en el fuego, le añadimos las diez cucharadas soperas de aceite de oliva, los tres dientes de ajo enteros con las pieles y aromatizamos el aceite unos segundos.

A continuación, ponemos los trozos de pollo junto con el corazón y la molleja todo bien lavado. espolvoreamos con sal, pimienta negra y dejamos freír durante tres minutos sin mover los trozos de pollo de la posición que los hemos puesto.

Mientras tanto, cortamos la cebolla en juliana junto al pimiento verde y reservamos.

Pasados los tres minutos y veamos que comienzan a ponerse Blanco por los lados los trozos de pollo.

Cogemos una pinza y le damos la vuelta a los trozos de pollo y esta vez solo los dejaremos un par de minutos por este lado.

Pasado los dos minutos, nos aseguramos que los trozos de pollo estén todos sellados.

A continuación, los retiramos y reservamos en un plato.

Seguidamente, en los mismos juegos del pollo, añadimos las cebollas y los pimientos en juliana.

A continuación, cogemos una lengua y removemos bien durante unos treinta segundos arrancando el fondo de la cazuela, para levantar todos los jugos que se han quedado pegado en el fondo de la cazuela y que iremos viendo como la cebolla va cambiando de color al instante.

Seguidamente, sofreímos durante tres minutos removiendo de vez en cuando.

Mientras tanto, cogemos y cortamos los tomatitos charys por la mitad y reservamos.

Pasados los tres minutos, veremos como se ha caracterizado las cebollas y el sofrito en general. Esto es muy importante.

A continuación, añadimos las mitades de tomatitos charys, las zanahorias y las cinco cebollitas moradas.

Seguidamente, cogemos una lengua y comenzamos a remover con movimientos envolventes muy suaves durante un minuto sin dejar de remover para que se caramelicen las verduras.

Pasado el minuto de tiempo, le añadimos la cucharadita de curry japonés y sal fina Marina al gusto.

Seguidamente, cogemos una lengua y rehogamos las verduras durante unos treinta segundos sin dejar de remover.

Pasados los treinta segundos, le añadimos la mitad del caldo y removemos bien para levantar el sofrito del fondo de cazuela.

A continuación, tapamos la cazuela y dejamos cocinar a fuego lento durante quince minutos. Las zanahorias y las cebollitas, son orgánicas y suelen tardar el doble o más que las de grandes producciones que se venden en los supermercados.

Pasados los quince minutos, destapamos la olla.

A continuación, le añadimos el resto del caldo, removemos bien de nuevo y le añadimos los trozos de pollo junto al los jugos que hayan soltado en el plato.

Seguidamente, volvemos a tapar la cazuela, bajamos el fuego y dejamos cocinar durante veinte minutos y listo...