Estofado de pollo con patatas y zanahorias

Ptega
Ptega @ptega
Santander

Es cierto que cuando llega el calor se suelen hacer menos estofados porque aparecen cosas fresquitas para comer, pero de vez en cuando apetece. Es un plato sencillo, muy rico y que vamos a preparar a fuego lento.

Leer más
Editar receta
Ver informe
Compartir

Ingredientes

1 h y 15 min
3 raciones
  1. 2contramuslos de pollo
  2. 1pimiento rojo
  3. 2puerros
  4. 2-3zanahorias
  5. 2patatas medianas
  6. 100 gsalsa de tomate
  7. 1 cucharaditaajo en polvo
  8. 1 cucharaditatomillo
  9. Sal y pimienta negra
  10. Aceite de oliva virgen

Paso a paso

1 h y 15 min
  1. 1

    Empezamos agrupando todos los ingredientes. Pelamos las zanahorias y cortamos en rodajas. Troceamos el puerro en rodajas y en dados el pimiento. Pelamos las patatas, las cortamos por la mitad y luego en láminas gruesas. Deshuesamos y limpiamos de piel y grasa los contramuslos de pollo y los troceamos al gusto.

  2. 2

    Ponemos una cazuela amplia al fuego con un chorrito de aceite y cuando esté caliente agregamos los puerros junto con un poquito de sal y el ajo en polvo y dejamos pochar a fuego medio-lento 10 minutos. Agregamos las zanahorias y rehogamos 5 minutos.

  3. 3

    Salpimentamos la carne y la añadimos a los puerros y zanahorias y salteamos a fuego medio-alto unos minutos, hasta que la carne coja color.

  4. 4

    Incorporamos los pimientos y dejamos cocinar 5 minutos a fuego medio-lento. Añadimos la salsa de tomate y el tomillo, mezclamos y cocinamos 5 minutos más. Agregamos las patatas y medio vaso de agua y dejamos que se haga todo junto a fuego medio-lento 30-40 minutos, hasta que las patatas estén tiernas. Si es necesario agregamos un poquito más de agua.

  5. 5

    Ya tenemos nuestro plato listo, servimos caliente y con pan para aprovechar la salsa. Espero que os guste!!

Editar receta
Ver informe
Compartir

Comentarios

Escrita por

Ptega
Ptega @ptega
Santander
He de confesar, que nunca me había gustado la cocina, es más de chiquitilla solía huir de ella y casi lloraba cuando los Reyes me traían una cocinita. Es más hasta que me casé sólo entraba en la cocina por necesidad, por pura subsistencia, había que comer y de platos precocinados y carnes o pescados a la plancha no pasaba.Tras casarme, empecé a curiosear por Internet y a intentar elaborar las recetas que encontraba, a veces con más acierto y otras con menos y en ese tiempo descubrí que la cocina me relaja, que me gusta probar cosas nuevas, aunque a veces con las prisas acabamos con el sota, caballo y rey.Ahora os cuento un poquito de mi, soy, como dice una amiga, una viejoven. Me gusta pasar el tiempo con la gente que quiero, ansío cada año que llegue el 15 de mayo para volver al pueblo de mi infancia y reencontrarme con esos amigos que no necesitas ver a menudo para saber que han sido, son y serán las personas que con un gesto borran todas las tristezas.
Leer más

Recetas similares