El proceso de reposo depende de la temperatura en ese momento.

En un medidor echar el agua y templar en el Microondas, se sabe que esta templada cuando metes un dedo y no quema.

Llenar un vaso con 1/3 de esa agua y reservar el resto. Al vaso le añades el azúcar y la levadura, mezclar muy bien y dejar reposar hasta que suba hasta el borde del vaso. Según la receta entre 5 y 10 minutos, a mí me subió antes pues era verano y hacia 40ºC, así que vigilar y no te confíes del tiempo.

Le añadimos el contenido del vaso, una vez fermentado y lo mezclamos con la harina, y le vamos añadiendo el resto de agua, y mezclando bien, echando toda si la admite. Yo suelo mezclarlo con el brazo amasador unos 5 minutos, hasta que se despega del bol. Sino pasas la masa a una encimera y la amasas unos 3 minutos hasta obtener una masa homogénea.

Pasa la masa a la bandeja de horno sobre papel de hornear, y le das la forma que quiera, o como yo hice, en una bandeja rectangular mediana, puse el papel de horno y eche encima la masa, en los dos casos, tapar la masa con un paño y dejar reposar hasta que doble el volumen, según la receta unas 2 horas a temperatura ambiente, yo en ½ h, ya había doblado el volumen, llegando al filo de la bandeja, por eso es importante vigilar la masa, según la temperatura que hay en el lugar.

Una vez doble el volumen, calentar el horno a 220ºC con calor arriba y abajo. Meter un recipiente con agua en la parte inferior. Yo por otras recetas, prefiero taparlo con papel de horno mojado bajo el grifo.

A la masa hacerles unos cortes y espolvorear con un poco de harina y meter en el horno, en mi caso con papel de horno mojado por encima y hornear durante 10 minutos a 220ºC y luego bajar la temperatura a 180ºC durante 15 minutos, quitar el papel de horno y dejar 10 minutos más para que se dore por encima.

Luego puedes cortarlo como hice yo en 8 porciones y lo congele, para tomarlo según quiera.

Puedes darle la forma que más te guste, redonda, rectangular, etc., sobre papel de horno solo o en una bandeja forrada.