Para empezar, derretiremos la mantequilla. Después la verteremos en la picadora y pondremos dos galletas por vaso, es decir 8. Trituraremos hasta que quede todo como arenoso. Repartiremos por los 4 vasos, lo aplanaremos con una cuchara y a la nevera.

Mientras fundiremos 50 g de chocolate blanco. Cuando lo tengamos listo lo integraremos en un bol con la nata y el queso.

Muy seguramente al estar frío el queso o la nata, se enfríe rápido el chocolate y quede una especie de ''grumo''. Os recomiendo meterlo a intervalos cortos, 10 seg al microondas e ir mezclando, en principio con 3 veces tendría que estar todo más que integrado, pero tampoco abuséis del microondas, tiene que ser súper sutil este paso. Por último, añadiremos el azúcar glass.

Mezclamos todo. Sí os gusta más dulce, es el momento de rectificar y añadirle más. A mí personalmente no me gusta que quede muy dulce porque considero que con el lotus ya lo equilibra. Pondremos nuestra mezcla en los vasitos, los tapamos con papel film y otra vez a la nevera.

Por otro lado nos pondremos con la crema. En la picadora pondremos las galletas, la mantequilla y el chocolate blanco previamente derretidos. Trituraremos hasta obtener una crema. Hay que insistir un poco. Yo he ido parando y mezclando con una cuchara para que todo se integre bien al picarlo.

Derretiremos 10 gr de chocolate blanco, lo pondremos en una manga pastelera o similar y dibujaremos nuestros arbolitos o lo que vosotros queráis. Si no lo vais a consumir ya, taparlo con papel film y a la nevera.