Bizcocho casero o "Queque"

Sacar las semillas de las vainas de cardamomo y reducirlas a polvo. Yo utilizo la Thermomix por su velocidad y comodidad pero, en ocasiones, también lo hago en un mortero. Poner el cardamomo junto con la harina, el bicarbonato y la levadura tamizados. Añadir la canela y la ralladura de limón y mezclar todo bien. Reservar.

Separar las claras de las yemas. Batir las claras a punto de nieve. Yo le pongo la mitad o la tercera parte del azúcar para que quede casi como un merengue y no se licúen las claras mientras amaso el resto de los componentes líquidos.

Batir las yemas e incorporar el resto del azúcar poco a poco, sin dejar de añadir constantemente. Cuando hayamos acabado de poner el azúcar, echar la esencia de vainilla, el yoghourt, el aceite y el agua de azahar y batirlo bien. Ir incorporando los ingredientes secos que ya tenemos mezclados, poco a poco. Cuando hayamos terminado de mezclarlo vamos a poner las claras a punto de nieve y mezclar a mano, si fuera posible, para que no se baje la masa y quede bien esponjoso.

Esta vez utilicé una fuente ovalada de Pyrex para horno de unos 12 cm de alto y puse un papel de hornear húmedo, en lugar de engrasarlo con mantequilla y enharinarlo. Lo puse en el horno a media altura, con circulación de aire y calor abajo y arriba. Bajé la temperatura a 150ºC y lo dejé horneándose 45 minutos. Después de comprobar si estaba bien cocido, tuve que dejarlo 20 minutos más, en tandas de 10 minutos. Finalmente lo saqué del horno y lo dejé enfriar sobre una rejilla.