Panna Cotta de chocolate blanco y coulis de fresa

Ptega
Ptega @ptega
Santander

Vamos con un postre muy fácil, muy vistoso y con muchísimo sabor. Las fresas con el chocolate blanco combinan perfectamente.

Leer más
Editar receta
Ver informe
Compartir

Ingredientes

+ 1h
3-4 raciones
  1. Panna cotta de chocolate blanco:
  2. 300 mlleche entera
  3. 100 mlnata
  4. 90 gchocolate blanco
  5. 4 hojasgelatina neutra
  6. Coulis de fresas:
  7. 250 gfresas
  8. 80 gazúcar
  9. 3 cucharadaszumo de limón

Paso a paso

+ 1h
  1. 1

    Empezamos con la panna cotta y agrupamos todos los ingredientes.

  2. 2

    Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría durante 5 minutos. Ponemos la nata y la leche en un cazo y cuando esté a punto de hervir agregamos el chocolate blanco, removemos hasta que el chocolate se derrita, lo vamos a hacer a fuego medio.

  3. 3

    Escurrimos las hojas de gelatina, las agregamos al chocolate derretido y cocinamos hasta que se integre todo perfectamente. Retiramos del fuego y vertemos en los moldes que vayamos a usar. Dejamos enfriar a temperatura ambiente, cubrimos con papel film y llevamos a la nevera. Dejamos reposar 3 horas.

  4. 4

    Vamos con el coulois de fresas. Agrupamos todos los ingredientes, cortamos en trocitos las fresas y exprimimos el zumo de limón.

  5. 5

    Ponemos en cazo al fuego las fresas junto con el azúcar y dejamos que se cocine todo junto a fuego medio 15 minutos, removemos de vez en cuando. Vertemos el zumo de limón y dejamos al fuego 10 minutos más.

  6. 6

    Retiramos del fuego, trituramos con la batidora y volvemos a llevar al fuego y cocinamos un par de minutos. Vertemos la mezcla en una jarrita o un biberón y dejamos templar.

  7. 7

    Sacamos la panna cotta y vertemos sobre ella el coulois de fresas y llevamos a la nevera hasta el momento de consumir. Espero que os guste!!

Reacciones

Editar receta
Ver informe
Compartir

Comentarios

Escrita por

Ptega
Ptega @ptega
Santander
He de confesar, que nunca me había gustado la cocina, es más de chiquitilla solía huir de ella y casi lloraba cuando los Reyes me traían una cocinita. Es más hasta que me casé sólo entraba en la cocina por necesidad, por pura subsistencia, había que comer y de platos precocinados y carnes o pescados a la plancha no pasaba.Tras casarme, empecé a curiosear por Internet y a intentar elaborar las recetas que encontraba, a veces con más acierto y otras con menos y en ese tiempo descubrí que la cocina me relaja, que me gusta probar cosas nuevas, aunque a veces con las prisas acabamos con el sota, caballo y rey.Ahora os cuento un poquito de mi, soy, como dice una amiga, una viejoven. Me gusta pasar el tiempo con la gente que quiero, ansío cada año que llegue el 15 de mayo para volver al pueblo de mi infancia y reencontrarme con esos amigos que no necesitas ver a menudo para saber que han sido, son y serán las personas que con un gesto borran todas las tristezas.
Leer más

Recetas similares